Castilla y León tendrá un Pacto por la Infancia en noviembre

El «Pacto por los derechos de la Infancia de Castilla y León» se presentará en noviembre, con una apuesta por el derecho a una familia, que supondrá el fomento de las adopciones y acogimientos familiares frente a los residenciales. (Extracto de la noticia publicada en www.abc.es, 13 de Junio de 2012)

Así lo ha anunciado la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Milagros Marcos, en su comparecencia ante comisión de las Cortes regionales para explicar las cuentas de su departamento para el 2012, que plantean 824,1 millones de euros, 51,5 millones menos que en año anterior, un 5,89 por ciento menos en términos relativos.

Marcos ha explicado que en el caso de los niños que no puedan vivir con su familia biológica se fomentará la adopción y los acogimientos de los niños menores de seis años, para conseguir que «este sistema llegue a sustituir en un futuro al acogimiento residencial».

«En Castilla y León queremos conseguir que el acogimiento familiar constituya la medida habitual para estos niños, y especialmente para los de entre cero y tres años», ha referido la consejera en su intervención.

Marcos ha explicado que ocho de cada diez euros de su consejería se dedican a los colectivos más vulnerables de la Comunidad, entre los que se encuentran los menores, junto a las familias en exclusión social, las víctimas de violencia de género y los dependientes.

En concreto las situaciones de desprotección infantil contarán con una ayuda de 44,3 millones de euros, el 82,5 de lo que la Consejería dedicará a atención a la infancia, que cuenta con un crédito de 53,7 millones, un 17,54 por ciento más que en 2011.

Para acogimientos familiares, que suponen el 70 por ciento de los acogimientos en la Comunidad -716 a 31 de diciembre de 2011- se destinarán 3,1 millones, mientras que la red de centros de protección infantil -84 centros con 1.107 plazas- contará con 15,5 millones, un 31 por ciento más que en el ejercicio anterior.

Marcos ha defendido que las cuentas de su departamento representan el 8,5 por ciento del gasto de los presupuestos de Castilla y León, porcentaje que «prácticamente se mantiene» respecto a 2011, donde el peso de este departamento fue del 8,7 por ciento.