La crisis también está afectando seriamente a las entidades sin ánimo de lucro, lo que conlleva que tengamos que hacer una gestión aún más eficiente de los recursos: priorizar las actividades, especializarnos en las líneas de trabajo comenzadas…
Pero con eso no basta. El motor de las organizaciones no lucrativas es su base social.
¡Sois vosotros!